Gobierno
Coalición alemana logra acuerdo clave sobre coches eléctricos y subsidios
9.10.2025, 13:29
La coalición de conservadores y socialdemócratas que gobierna en Alemania alcanzó hoy importantes acuerdos sobre las subvenciones a los vehículos eléctricos, las pensiones y un nuevo plan de subsidio básico, según declaró el canciller Friedrich Merz.
Tras una maratoniana sesión de deliberaciones en la Cancillería, se selló un acuerdo entre el bloque conservador de Merz (CDU/CSU) y el Partido Socialdemócrata (SPD), lo que refuerza las esperanzas del canciller de poner en marcha su "otoño de reformas".
Sin embargo, sigue sin alcanzarse un consenso sobre la posición alemana respecto a la prohibición de la Unión Europea (UE) de los coches nuevos de gasolina y diésel para 2035, antes de la importante cumbre del sector automovilístico que se celebra hoy en la Cancillería en Berlín.
Merz anunció en una rueda de prensa que "habrá una nueva prestación básica para quienes buscan empleo, tal y como se acordó en el acuerdo de coalición".
El objetivo es endurecer las obligaciones de los beneficiarios de las prestaciones y tomar medidas contra el abuso del sistema. "Reforzaremos significativamente las obligaciones de cooperación y también aumentaremos considerablemente las posibilidades de sanciones", añadió Merz.
Esta política respecto a los desocupados, fuertemente respaldada por la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Merz y la Unión Social Cristiana (CSU) de Baviera, se enfrentó a la resistencia del ala izquierda de los socialdemócratas, pero fue impulsada por los líderes del partido, el vicecanciller y ministro de Finanzas Lars Klingbeil y la ministra de Trabajo, Bärbel Bas.
"Los que no cooperen lo tendrán difícil", declaró Bas. "Endurecemos las sanciones hasta el límite de lo constitucionalmente permisible". La titular de Trabajo insistió en que las medidas no afectarán a las personas con problemas de salud física o mental. "No queremos perjudicar a las personas equivocadas", aclaró.
La nueva prestación, que requiere ser aprobada por el Parlamento, sustituirá a la actual "renta ciudadana" (Bürgergeld, en alemán) para los desocupados, que había entrado en vigor a principios de 2023.
El líder de la CSU, Markus Söder, primer ministro del poderoso estado sureño de Baviera, recalcó: "La renta ciudadana ya es historia".
Otro avance clave de la reunión del comité de coalición fue el que atañe a las subvenciones para vehículos eléctricos.
El Gobierno se dispone a ofrecer nuevos incentivos a los hogares con ingresos bajos y medios para que compren vehículos eléctricos, con el objetivo de apoyar la transición hacia una movilidad climáticamente neutra y proporcionar "beneficios tangibles para los consumidores", según una resolución aprobada por los miembros del comité.
Sin embargo, con los representantes de la industria automovilística alemana, crucial para la economía nacional, los sindicatos y los líderes políticos reunidos hoy en Berlín para debatir cómo resolver la crisis que afecta al sector, el fracaso a la hora de alcanzar una posición común sobre la prohibición de los motores de combustión en la UE a partir de 2035 supuso un revés para la coalición.
La normativa, introducida en Bruselas en 2023, se revisará a finales de año, en medio de una fuerte oposición por parte de las automotrices.
Mientras que la alianza conservadora CDU/CSU está a favor de eliminar el objetivo, parte del SPD está preocupada por las repercusiones medioambientales y económicas del cambio de rumbo, con el ministro de Medio Ambiente, Carsten Schneider, como destacado opositor.
En los últimos días circularon rumores sobre un posible compromiso que incluiría los coches híbridos, pero Merz explicó que el miércoles no se pudo alcanzar un acuerdo definitivo en la comisión de la coalición.
"No estamos presentando a la industria automovilística una posición política ya definida", sostuvo el canciller. "En cambio, queremos hablar sobre lo que debemos hacer para superar lo antes posible la grave crisis que atraviesan la industria automovilística alemana y sus proveedores".
El copresidente del SPD, Klingbeil, añadió: "Si se invita a la gente a un diálogo, no se debe poner fin al diálogo antes de tiempo, sino después".
A pesar de la notable diferencia de postura sobre prohibir los motores de combustión, Merz aseguró que las conversaciones se desarrollaron en un "ambiente realmente bueno".
"También hubo un ambiente serio, porque estamos en tiempos serios", añadió por su parte el líder bávaro Söder.
La coalición encabezada por Merz, que asumió el cargo en mayo tras las elecciones parlamentarias de febrero, espera lograr una serie de reformas legislativas antes de que termine el año, con el objetivo de impulsar la ralentizada economía alemana tras dos años de recesión.
Una medida que podría avanzar en el Gabinete tan pronto como la próxima semana, tras el acuerdo del miércoles, es la denominada "jubilación activa", que permite a los jubilados ganar hasta 2.000 euros (2.320 dólares) libres de impuestos cada mes si continúan trabajando más allá de la edad de retiro.
Si se aprueba en el Parlamento, esta normativa podría entrar en vigor en enero.