Accionistas de Bayer critican a la dirección del grupo durante asamblea

Accionistas de la empresa agroquímica y farmacéutica alemana Bayer expresaron hoy su frustración durante la junta general de la firma y algunos plantearon reclamos a la dirección del grupo.

"La casa de Bayer está en llamas y usted, como dueño de casa, está empezando a limpiar en vez de apagar el fuego", reclamó Ingo Speich, de Deka Investment, al director general de Bayer, Bill Anderson, quien asumió el cargo a mediados de 2023 e inició un proceso de reorganización del grupo.

Speich agregó que Anderson no fue capaz de generar confianza en el mercado en su primer año y que incluso se aceleró la caída de las acciones.

Marc Tüngler, de la asociación de inversores privados alemana DSW, se refirió a una "evolución desastrosa" de la cotización bursátil.

Janne Werning, de Union Investment, también expresó su disgusto: "Mientras que el (índice bursátil alemán) Dax ha subido un 12 por ciento en los últimos 12 meses, los accionistas de Bayer han tenido que hacer frente a una pérdida de valor del 55 por ciento".

Werning recordó que antes de la adquisición de su entonces competidor estadounidense Monsanto, que se completó en 2018, Bayer valía en algunos momentos más de 100.000 millones de euros (107.000 millones de dólares).

"Hoy vale alrededor de 26.000 millones de euros, es decir, menos de la mitad del precio de compra que Bayer pagó por Monsanto". Werning planteó que la junta general realizada de manera virtual, en vez de presencial, fue una decisión de la dirección para mantener a los accionistas a distancia.

"Es una oportunidad perdida", dijo. "Solo el diálogo real en persona puede crear confianza, la evasión virtual no".

La empresa con sede en Leverkusen se enfrenta a un aumento de los litigios judiciales en Estados Unidos por los supuestos riesgos cancerígenos del herbicida glifosato, una cartera farmacéutica debilitada y elevadas deudas.

El estadounidense Anderson, director de Bayer, subrayó que la firma había progresado en el último año. Sin embargo, dijo, había que reconocer que aún quedaban grandes obras por hacer. El director general de Bayer defendió la reorganización de la empresa, en la que se van a suprimir muchos puestos directivos.